Un informe realizado por el Centro de Economía Política Argentina (Cepa) muestra que en el país los puestos de trabajo acumulan 36 meses de crecimiento. En la provincia superaron los 523 mil, el máximo de la serie histórica.

En julio se recuperaron en Santa Fe 48.186 puestos de trabajo desde el mínimo producido en mayo de 2020.

El empleo registrado se transformó en una de las variables que más llama la atención de los analistas en un 2023 poco entusiasta. De acuerdo al informe de empleo realizado por el Centro de Economía Política Argentina (Cepa), acumula 36 meses de crecimiento. Los 6.402.885 puestos de trabajo en julio significan un máximo en la serie histórica trazada por el centro de estudios.

La provincia comparte el récord nacional, con 523.279 puestos registrados. Una cifra 0,2% superior al mes anterior y que refleja que en Santa Fe se logró “reponer la destrucción de puestos registrados que significó la crisis del gobierno de Cambiemos y la pandemia de Covid-

En relación con otras jurisdicciones, Cepa observa que Santa Fe logró recuperar el nivel de empleo prepandemia en abril de 2021 y el nivel de empleo pre-crisis de Cambiemos (abril de 2018), en junio del 2022. En el caso de Córdoba, dicha recuperación, se dio en agosto de 2021 y noviembre de 2022 respectivamente.

Por tanto, la recuperación de Santa Fe evidenció un mayor dinamismo, logrando recuperarse de ambas crisis de empleo, entre 4 y 5 meses antes que la provincia de Córdoba.

Esto lleva a la provincia a forma parte del grupo de gobiernos subnacionales que muestran variaciones superiores al 5%, es decir, las provincias cuya recuperación fue más dinámica. Se encuentra un 7,2% por encima de prepandemia.

A julio de 2023, en la provincia de recuperaron 48.186 puestos de trabajo desde el mínimo producido en mayo de 2020 a raíz de la crisis pandémica. De acuerdo con los últimos datos arrojados por el Ministerio de Trabajo, de junio a julio se crearon 940 puestos de trabajo formales en la provincia.

Ese crecimiento está encabezado por la construcción, casi 18% comparativamente con 2020. Lo siguen la industria (10,6%), los servicios inmobiliarios (7,8%), la electricidad, gas y agua (7,4%), el comercio (6,7%) y la agricultura (6%). El incremento tiene lugar en un contexto en que la actividad económica se ameseta.

Fuente: La Capital