jueves 14 noviembre, 2024 / Industria

LA UTILIZACIÓN DE MÁQUINAS EN LA INDUSTRIA CAYÓ DURANTE TODO EL 2024

En lo que va del año, la utilización de la capacidad instalada acumuló una contracción de 9,3 puntos respecto al 2023. El promedio fue del 62,4%, muy por debajo del 67,9% de septiembre del 2023.

El receso en las fábricas se siguió observando con claridad durante septiembre: la utilización de maquinarias fue del 62,4%, muy lejos del óptimo que puede disparar una necesidad inversora para evitar cuellos de botella, y bien por debajo del 67,9% de septiembre del 2023. El total de lo que va del 2024 fue el peor año de toda la serie histórica para el uso de las instalaciones fabriles, sin contar el 2020 pandémico.

La incipiente recuperación económica no permitió aún una vuelta del bienestar para los sectores urbanos, que se benefician menos del atraso cambiario, y cuyo salario sigue por debajo de noviembre del año pasado, con más carga de las tarifas, lo que impide consumir más, y con menos empleo.

El Indec publicó el informe de Utilización de la Capacidad Instalada en la  (UCII) correspondiente a septiembre. Además de la baja de 5,5 puntos que se observó todavía respecto a los niveles de uso de las instalaciones del año pasado, en la previa al impacto de la megadevalución de diciembre, que llevó a un histórico salto inflacionario, con una fuerte pérdida de poder adquisitivo en los salarios y una baja significativa del consumo masivo, también reflejó una incluso mayor contracción para el total del año. Vale destacar que el informe del Indec no permite realizar comparaciones mensuales, ya que no están libres de factores de estacionalidad (se deben contrastar en forma anual).

De hecho, en lo que va del 2024, el uso de las maquinarias fabriles fue de apenas un 57,4% promedio. Es decir, más cerca de una utilización a, literalmente, media máquina, que a una de los dos tercios de las instalaciones que se venía obsrvando en los años previos. De hecho, en 2023 y en 2022 la UCII había sido de 66,7% y 66,5%, respectivamente. Y en el 2021 todavía fuertemente influenciado por la salida de lo peor de la cuarentena, gracias a la aplicación de las vacunas, había sido de 62,4%.

El peor enero-septiembre, sin contar el 2020 pandémico

Acerca del optimismo oficial sobre “el fin de la recesión” en  la consultora Vectorial destacaron que “esta recuperación desigual se traduce en peores condiciones de vida para importantes franjas sociales, principalmente radicadas en centros urbanos en donde las actividades de industria, comercio y construcción son las más preponderantes, a la vez que han sido las que más caídas han sufrido en lo que va del año”.

De hecho, aunque el salario sigue por debajo de los niveles previos al actual Gobierno, tanto para los empleados privados como para los públicos, además la pérdida de empleo también se centró en esos oficios urbanos. En la industria se perdieron 29.700 puesto sólo  entre noviembre y agosto y en la construcción otros 66.000 puestos.

Mientras que la demanda de productos importados se vio impulsada por el atraso cambiario, el consumo interno sigue disminuyendo, en la medida en que el salario promedio  está 6,8% por debajo del de noviembre 2023, y las tarifas suben por encima de la inflación, lo que  obligan a los consumidores a bajar el gasto en los productos de consumo masivo producidos por la industria local.

Fuente: Diario Bae (Mariano Cúparo Ortiz)